Editorial: Todo se suspende, se hace virtual la existencia. Las calles se vacían del calor humano. Los comercios ponen el cartel de cerrado, se vende o se alquila, nadie, ninguno, escribe se traspasa. Todos/as están convencidos que la temporada de 2021 ha terminado a falta de tres meses de su comienzo. En el País de Pepe Gotera y Otilio y los Reinos de Taifas la tristeza ocupa la vida, ni los más optimistas se atreven a emplear la carcajada como terapia. Hemos llegado aquí porque quienes gestionan las instituciones nacionales deben ser destituidos sin más demora, fulminante.

Me mandan desde la redacción a cubrir la última manifestación contra Francina Armengol, esa socialista que estaba tranquila en su Taifa y un día despertó de su plácida siesta, presiento que le vienen muchas. El personal no puede más. No puedes cerrar un negocio y olvidarte de lo más importante, como se pagarán los gastos e impuestos,. Paradójico, aquellos que pagarán las nóminas de los funcionarios, políticos, inversiones, mantenimiento de los servicios, esos lo tendrán que hacer de su propio bolsillo si quieren seguir con su negocio, empresa, comercio dado de alta. Quién lo entiende nadie, ninguno.

La borrasca Ignacio ya está aquí. Menos mal que habrá grandes claros y veremos el sol con bastante determinación. Pero habrá algo de viento. Y rachas de hasta 80 kilómetros hora. Encima de lo que se ha movido se vuelve a incidir con el nuevo temporal sin llegar a mucho más. Cuidado con las corrientes de aire en los domicilios, atención en todos y cada uno de los protocolos de siempre. No dejar coches debajo de árboles y tejados. Mantener las puertas sin posibilidad de corrientes de ninguna índole.

Los profesionales de las antenas tienen demandas de arreglos en más de 500 domicilios, si sumamos Manacor, Porto Cristo y otras localidades del municipio. Tendrán que poner personal extra. Conozco un electricista con una lista de 30 clientes que esperan al lunes como agua de mayo. Toquemos madera para que Ignacio llegue a Baleares desgastado y con los pulmones vacíos. También se preparan para arreglos de todo tipo albañiles. Se llevó el temporal Hortensia muchas tejas, elementos de todo tipo, paredes, puertas de cocheras. Los seguros trabajan a destajo para mandar a sus inspectores y dar o no el visto bueno del presupuesto.

Las empresas de alojamiento, que son junto a las agencias las que han sufrido la mayor caída de ingresos, superan la barrera de los 100.000 empleados en ERTE (111.479 a 31 de diciembre). Por encima están las de restauración con 241.390, mientras que las compañías aéreas concluyen el año con la nada desdeñable cifra de 14.488 afectados. De media, según la serie por fecha de alta, en el mes de diciembre ha habido 782.915 personas en ERTE, frente a las 865.677 de la serie revisada del mes anterior y las 676.905 de octubre. “Continúa, así, la estabilización del número de trabajadores protegidos iniciada en septiembre, a pesar de las nuevas restricciones administrativas para afrontar la segunda ola de la pandemia”.

El Gobierno cree que la crisis del coronavirus supone una oportunidad para España de “salir del turismo de sol y playa” y diversificar la oferta turística del país. Las declaraciones de Valdés se producen apenas cuatro después de que el propio Sánchez anunciase que no habrá temporada de verano en España debido a la lentitud del plan de vacunas. Tras entrevistar a más de 17.000 turistas de 29 países el pasado septiembre, el informe apunta que los turistas querrían encontrar en España una mayor variedad de oferta, destinos menos masificados y más rutas naturales y culturales. Por ello, Valdés cree necesaria “la diversificación de la oferta y la creación de un producto que mejore la calidad del destino y el valor añadido de la estancia”.